La infancia aún es una minoría subvalorada en la sociedad, no solo en nuestra sociedad colombiana sino también en todo el planeta que está conquistando los espacios de compresión y valoración de sus derechos como en algún momento lo hicieron las mujeres, los trabajadores y las minorías étnicas. Es mucho lo que se habla de los niños, niñas y adolescentes cuando el Estado, débil en su responsabilidad, intenta actuar con efectividad a su favor, pero al interior de la sociedad, en las familias principalmente, el irrespeto, el abuso, el mal ejemplo hacia ellos predominan, y con esa contraparte se dificulta la acción efectiva para proteger sus derechos.
Por fortuna desde 2006 en Colombia se promulgó la Ley de Infancia y Adolescencia, unos de los Códigos en favor de la infancia mejor redactados y con mejores herramientas para proteger a los niños, niñas y adolescentes, que tiene como gran soporte argumentativo la Convención Internacional por los Derechos del Niño; desde ahí como punto de partida y a paso lento pero firme, la sensibilidad hacia la aceptación de los niños, niñas y adolescentes como sujetos de derechos ha ido creciendo tanto en los escenarios del Estado como en la sociedad, por eso, desde esa fecha y NO ANTES, ya se pueden identificar y analizar con criterio, muchas de las actividades en donde participan los niños, niñas y adolescentes que vulneran sus derechos y que antes “no se veían”
Hay que reflexionar y no pelear, hay que disponer en una balanza los pros y los contra reales, hay que analizar de qué forma estamos tratando a niñas, niños y adolescentes de nuestro entorno, hay que, por primera vez, asumir la responsabilidad de padres, hermanos, cuidadores frente a la infancia…es una gran oportunidad que tenemos para abrir los ojos, comprometernos y darle bases fuertes a nuestra sociedad.
@infanciavisible
No hay comentarios:
Publicar un comentario