No solo es desnutrición es... ¡La
Vida!
Hay suficiente comida, hay suficientes
recursos pero es muy escasa la voluntad política y el liderazgo institucional.
En Colombia los Objetivos del Desarrollo del Milenio en lo que tiene que ver
con la infancia (hambre y mortalidad) se han quedado cortos con el impacto
esperado, muchas intenciones en el papel y cifras convenientes. El caso de los
niños y niñas Wayúu en La Guajira que padecen hambre, desnutrición y condena a
muerte, es la situación más emblemática que debe servir para reconocer la trágica
realidad de la infancia en Colombia; recorrer las zonas urbanas y zonas rurales
del país solo muestra un panorama desalentador y triste, que se compensa a
veces con la actitud innata de supervivencia. De poco sirve la intención del
Presidente si sus mal llamados servidores no tienen ni el talante, ni la
capacidad de servir, ni el compromiso para asumir la responsabilidad de velar
por el derecho fundamental más valioso de niñas y niños colombianos: La vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario